La viabilidad de un nuevo negocio dependerá de muchos factores, y uno clave es contar con una visión económica y financiera global del proyecto. Conocer las distintas posibilidades, productos y vehículos, sean bancarios, en forma de aval o créditos es un deber para toda persona emprendedora para promover proyectos con mayores garantías. Un ejemplo de producto financiero propio han sido los microcréditos avalados B·Credits, llevados a cabo con el ICF y Avalis SGR, mediante los cuales cientos de empresas han conseguido disponer de un cojín en un momento duro por los efectos de la pandemia.